inspiraciones para (h)OTEL

El hotel como posición


Todo espacio tiene su dimensión, su forma y su contenido. Todo espacio necesita de la primera para que podamos hablar de cómo se presenta (su forma) y de lo que acoge (su contenido). Sin dimensión, estaríamos hablando de un punto y nada podríamos añadir sobre su forma y contenido.

Pero para caracterizar lo que define un espacio, no siempre la dimensión es esencial. Porque todo espacio está contenido por otro, respecto del cual ocupa una posición. Y, en muchos casos, la posición condiciona la dimensión.

Podríamos, pues, barajar la hipótesis de que la esencia de un espacio tiene más que ver con la posición relativa que con su dimensión absoluta y que, por lo tanto, su diseño y desarrollo estará más ligado a sus coordenadas que a su dimensión, forma y contenido. Lo relacional por encima de lo arquitectónico.

Pensemos en un hotel. Y no sólo como habitualmente lo hacemos, es decir, con su dimensión, forma y contenido. Observemos su aspecto relacional, su infinita capacidad de albergar relaciones ¿no define mejor esto su esencia que su fachada, sus servicios o sus habitaciones?

Pensemos, ahora, en la posibilidad de desarrollar una sociedad más inclusiva que la actual ¿hacia dónde mirar? ¿hacia un solo punto o hacia muchos (o todos)? ¿desde dónde mirar? ¿desde un solo punto o desde muchos (o todos)?

NL

PD. Y pensemos, también, en nuestro propio desarrollo personal ¿hacia? ¿desde?